Al menos 25.000 personas se quedaron sin hogar por un incendio de origen desconocido que arrasó un barrio de casillas al este de la capital filipina. Aproximadamente siete personas sufrieron heridas leves, indicaron hoy fuentes oficiales.
El jefe de bomberos de la ciudad, Santiago Laguna, indicó que el fuego se originó anoche y pudo ser extinguido recién al amanecer debido a que los materiales de las chozas recrudecían su propagación.
"Nos costó mucho luchar contra las llamas porque las calles son muy estrechas y las casas están construidas con materiales muy ligeros", explicó.
Las primeras averiguaciones indican que el fuego, que destrozó alrededor de 500 casas y dejó en la calle a 5.000 familias, empezó en el segundo piso de un edificio por un cortocircuito.
Incendios de este tipo son muy frecuentes en Manila debido a que muchas casas fueron construidas con materiales altamente inflamables y están amontonadas unas contra otras.
EFE
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